Las Crónicas del Rey Don Pedro representan unas Jornadas Medievales en las que se lleva a cabo una recreación histórica de los fastos que organizó el rey Don Pedro I de Castilla en 1353 en Torrijos con motivo del nacimiento de su hija, la infanta Beatriz, constatados a través de los textos del Canciller del rey, Pedro López de Ayala.
Las jornadas combinan diferentes teatralizaciones, desfiles, juegos, talleres, demostraciones de tiro con arco y de espadas, puestos medievales, correfoc (espectáculo pirotécnico), etc., donde los integrantes de las múltiples asociaciones de la localidad y los propios torrijeños toman las riendas de las jornadas y muestran que son el alma de este proyecto. Los niños y niñas juegan un papel importante en estos festejos, celebrando previamente su Crónica Chica.
Contextualización histórica
Pedro I de Castilla, cuyo reinado se extendió entre 1350 y 1369, siguió los pasos de su padre Alfonso XI de Castilla fortaleciendo el poder real en detrimento del de la nobleza. Estos hechos le valieron el apelativo de «el Cruel», entre sus opositores, y de «el Justiciero», entre sus fieles. Por sus órdenes fueron ejecutados, entre otros, figuras destacadas como su hermanastro Fadrique, maestre de la orden militar de Santiago, el noble Pedro Núñez de Guzmán, o el emir de Granada, conocido entre los castellanos como el «Rey Bermejo». Esta actitud, unida a la prisión y posterior asesinato de su primera esposa, Blanca de Borbón, sobrina del rey de Francia, enrareció la vida política de la Corona y dio alas a la oposición nobiliaria frente al rey.
La nobleza rebelde que se enfrentó al rey quedó encabezada por su hermanastro Enrique, conde de Trastámara, hijo bastardo de Alfonso XI y de su amante, Leonor de Guzmán. En una situación de enorme inestabilidad política y social protagonizó la guerra civil castellana (1366-1369). El conflicto finalizó cuando Enrique mató a su hermanastro, Pedro I, en las cercanías del castillo de la Estrella, en Montiel (Ciudad Real). La salida de Pedro de su refugio, para negociar su huida del acorralamiento, fue aprovechada para asesinarlo. Fue en la noche del 22 al 23 de marzo, en la posada de Beltrán Du Guesclin, caudillo de las tropas mercenarias francesas conocidas como las Compañías Blancas, aliadas de Enrique, donde Pedro, tras ser víctima de una emboscada, pensando encontrar su salvación, halló la muerte.
El fratricidio supuso el inicio de la dinastía Trastámara, que regiría los destinos de Castilla hasta la instauración de los Austrias, en el siglo XVI.
Recreación de varios pasajes históricos de la vida de Pedro I. Torrijos queda vinculado históricamente a la figura del rey, al llevarse a cabo en la localidad la celebración de los festejos organizados con motivo del nacimiento de su primogénita, la infanta Beatriz, eje central de las jornadas. Al mismo tiempo se suceden toda una serie de actividades secundarias que sirven para dar cohesión a los actos principales, de tal manera que los asistentes podrán vivir e incluso formar parte tanto de la vida cotidiana en la segunda mitad del siglo XIV, como de los actos suntuosos que puntualmente podía vivir el pueblo llano.
Hechos históricos recreados
Espacios